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La sostenibilidad es algo que cada día se tiene más en cuenta a la hora de crear un espacio, y son características primordiales para el diseño de interiores. Aseguran las necesidades del presente sin peligrar las del futuro, respetando siempre el medio ambiente.

Ha llegado el momento del cambio en el campo del diseño de interiores. Para abordar estas cuestiones medioambientales, los interioristas tienen que trabajar en conjunto con profesionales de la construcción.

La edificación tiene un crucial impacto en el medio ambiente, y los proyectos de interiorismo no son una excepción. Los interioristas, cuya labor principal se centra en proyectos de remodelación, iluminación y elección de materiales, se encuentran en una buena situación para apoyar el cambio y tener en cuenta los aspectos medioambientales. Para exponer este enfoque, hemos de entender los principios en los que se basa el diseño sostenible. Estos principios afectan en la elección de sistemas de energía, agua, materiales y en los métodos de construcción. También debemos pensar cómo adaptar estos conocimientos a los diferentes proyectos, ya sean temporales, flexibles o a largo plazo, con el objetivo de asegurarnos encontrar el resultado más sostenible posible.

Un proyecto sostenible debería incluir los siguientes principios:

Aplicaciones en diseño de interiores.

Los arquitectos pueden tener por sistema una visión a largo plazo, sobre cuáles son los métodos de construcción, los sistemas de energía, de agua y los materiales apropiados, para minimizar el impacto medio ambiental a lo largo de la vida del diseño. Sin embargo, los interioristas debemos tener en cuenta el tiempo que se utilizarán sus diseños y que pasará con los materiales, una vez que se dejen de utilizar. La gran tasa de cambios en el sector, con interiores que hay que renovar y reformar con frecuencia, generan una cantidad de residuos importantes. Sin embargo, con las pautas adecuadas, tenemos la posibilidad de desplegar nuestra habilidad para resolver problemas combinando principios del pasado con tecnología moderna y encontrar soluciones válidas. Debemos identificar el tipo de proyecto, según el tiempo de duración y como hemos indicado antes, pueden ser Temporales, Flexibles o a Largo plazo.

No merece la pena invertir en una solución compleja o que consuma mucha energía, en un proyecto que se utiliza durante un periodo corto de tiempo. Por lo que la sostenibilidad, se aplica dependiendo del tipo de proyecto:

Un Proyecto Flexible, es aquel proyecto que necesita adaptarse a los cambios en cuanto a su distribución y uso. Por lo que debe ser lo bastante flexible para acomodar cambios diarios o para adaptarse a cambios a lo largo del tiempo. Este tipo de proyectos necesitan que el interiorista sea ingenioso, innovador y avanzado, capaz de crear espacios prácticos y adaptables.

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Cómo ningún proyecto es permanente, se consideran proyectos de duración indefinida a los proyectos a largo plazo. En este caso la prioridad es invertir en materiales resistentes, duraderos y con buena eficiencia energética, tanto integral como hídrica, además de tener en cuenta el uso continuado, la limpieza y la renovación. Un ejemplo es una vivienda unifamiliar, donde hemos de intentar dejarla abierta a distintas posibilidades y variaciones previsibles, como nuevos materiales o nuevas tecnologías, y saber reaccionar a retos pronosticados, tales como el efecto del cambio climático. Por ejemplo, intentar escoger soluciones que nos permitan en un futuro cambiar la funcionalidad de una estancia.

Una vez se conocen la duración y los requisitos de flexibilidad ya se pueden plantear un enfoque de diseño sostenible.

 Una vez establecido el tipo de proyecto que vamos a acometer, debemos realizarnos las siete preguntas, que exponemos a continuación y que ayudan al interiorista a repasar el proceso de diseño y asegurarse que ha tenido en cuenta todas las fases del ciclo de vida, con vistas a desarrollar un diseño sostenible.  

Estas preguntas nos ayudaran a tomar las decisiones conceptuales del diseño, mientras todavía hay tiempo para marcar la diferencia. Después, a medida que se desarrolla el proyecto y se toman decisiones más detalladas, hay que considerarlas constantemente.

Estas preguntas son:

Después de tener la contestación a todas estas preguntas, llega la hora de la elección de los materiales.

La elección de materiales también afecta a la disminución de recursos y de la biodiversidad. Por ejemplo, elegir materiales renovables como el bambú que crece rápidamente, ayudará a asegurar que los recursos del planeta se renueven, así como reducirá la pérdida del hábitat.

Para poder hacer una buena elección de materiales debemos tener en cuenta estos procesos: Reducir, reutilizar, recuperar y reciclar.

 

Reducir, Reutilizar, Recuperar y Reciclar.

Estos son los pasos que debiéramos seguir a la hora de escoger materiales en un proyecto de interiorismo, para minimizar el impacto ambiental, si queremos cumplir con aspectos sostenibles. Se conocen comúnmente cómo las cuatro “erres”.

Reducir, es el primer paso que debemos hacer como interioristas, es decir, reducir la cantidad de materiales que se necesitan en un proyecto y sus efectos negativos para el medio ambiente. Esto significa reducir la cantidad de materias primas, así como de residuos, el embalaje, la energía incorporada, el consumo de agua, transporte y la contaminación ambiental, asociada a materiales utilizados. Para ello debemos tener en cuenta el ciclo completo de un producto potencial, para poder reducir los impactos medioambientales en cada fase. Resulta útil utilizar una lista de control de las especificaciones, para asegurarse que estamos teniendo en consideración todas las repercusiones medioambientales, asociadas con un material a lo largo de su ciclo de vida.

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El segundo paso debiera ser reutilizar y recuperar, yestos pasos son más eficaces que reciclar, debido a la energía, agua y transporte que son necesarios en el proceso de reciclado. Así que si tenemos a nuestro alcance materiales que ya se hayan usado, podemos reconvertirlos en una nueva parte de nuestro proyecto, dándoles una nueva vida útil. 

El reciclaje es sólo otra de las cuatro “erres”. A menudo, el reciclaje de materiales y recursos es el mero resultado del exceso de consumo o de no tomar en consideración el ciclo de vida de los recursos. Para descomponer los residuos es necesario consumir energía de nuevo, por lo que el reciclaje debiera considerarse una de las ultimas opciones.

El mayor desafío para cualquier interiorista consiste en utilizar únicamente materiales renovables y reutilizables, prescindiendo de los no renovables.

Además, es importante, minimizar la energía necesaria al transporte de materiales pesados que no puedan fabricarse in situ, como piedra o ladrillo, buscando proveedores cercanos a la obra. La polución y el resto de las molestias medioambientales también serán menores. El suministro de materiales ligeros y nuevos debiera hacerse en un radio inferior a 100 Km de la obra. En cuanto a los materiales recuperados, se puede justificar su suministro más allá de ese radio. Antes de escoger un material, siempre hay que comprobar certificados medioambientales de cada uno de los componentes, tanto si provienen de suministradores locales como si no.

En conclusión, en los tiempos que estamos, un proyecto de éxito tiene que abordar todos los aspectos importantes del diseño y la sostenibilidad, que han de formar parte del núcleo del proyecto. Hemos de actuar para salvaguardar nuestra supervivencia, ser sensatos y asegurarnos de que siempre tendremos acceso a los alimentos, energía, agua limpia y la naturaleza. 

Además, como seres humanos, tenemos la obligatoriedad de proteger los ecosistemas y sus especies, puesto que hemos sido nosotros los causantes de diferentes problemas medioambientales, y somos los únicos que tenemos la aptitud y el conocimiento necesario para solucionarlos. Este articulo no está enfocado para que nos culpabilicemos, puesto que no sirve de nada. Es mejor aceptar el presente e intentar darle soluciones, aportando nuestra capacidad como interioristas para mejorar el mundo que nos rodea.