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Reformar y decorar una casa rural
- 14/07/2022
- Publicado por: Pilar
- Categoría: Blog Decoración Interiorismo Mobiliario
Adaptar una casa rural a las comodidades actuales, manteniendo su identidad, no siempre es una tarea fácil. La reforma que realicemos tiene que asegurar la conexión entre su historia pasada y el presente, por lo que combinar ambos aspectos, en ocasiones, es difícil.
Una de las primeras cosas que tenemos que considerar es asegurarnos de lo que le falta a la casa para garantizar la comodidad de los habitantes. Por eso, lo primero que tendremos que verificar es el estado de la estructura, los techos, el aislamiento y por supuesto, la fachada. Tampoco debemos olvidar aspectos tan importantes como las instalaciones eléctricas, de fontanería (abastecimiento de agua, saneamientos, etc.), así como las instalaciones de calefacción y climatización. Por el paso del tiempo, una de las partes que encontramos más estropeadas son las cubiertas, puesto que mayoritariamente se realizaban de madera, tejas o forjados, por lo que tendremos que remplazar los elementos dañados con materiales actuales más resistentes y, además, sería adecuado aplicar al resto algún tratamiento de protección, como, por ejemplo, un tratamiento anti carcoma para la madera.
También, en muchas ocasiones, la distribución actual de la mayoría de estas casas se encuentra muy alejada de los cánones de habitabilidad y comodidad de nuestra época, por lo que recomendamos que consigáis los planos originales de la casa y que un arquitecto pueda valorar su estructura, puesto que de ella depende la estabilidad de la construcción, por lo que es muy importante conocer todos estos aspectos antes de plantearnos cualquier redistribución. El saber la posición de los pilares o los muros de carga, facilitará desarrollar un proyecto de reforma más concreto, al conocer que zonas podemos derribar y cuales son intocables. Debéis tener en cuenta que este tipo de trabajos se considera “obra mayor”, por lo que es necesario que sea realizado por profesionales y, además, se necesita una licencia de obra del Ayuntamiento. Algo importante que tampoco debemos olvidar antes de realizar cualquier proyecto, es averiguar si la vivienda está protegida como interés histórico. Esta protección puede ser total o parcial, y es algo que se debe de consultar con anterioridad.
El interiorismo en una casa rural.
Una vez realizada la obra inicial para garantizarnos una buena estructura, un techo sólido, instalaciones actualizadas y una adecuada distribución de las estancias llega el momento de ponernos con el interiorismo, donde podemos incluir elementos originales que hayan podido estar ocultos por reformas anteriores. En ocasiones, algunas casas tienen muros gruesos e irregulares de piedra que han sido pintados posteriormente, por lo que picar algunas de esas paredes (aquellas que queramos que tengan mayor protagonismo) y devolverles su imagen del pasado, nos permite darle ese concepto de entorno rustico y con el resto de las paredes, bastara con darles una mano de pintura en blanco o colores claros, e inclusive podemos encalarlas para darles una imagen más rural. Así como dejarlas en estado natural para que conserve su esencia.
Si queremos mantener esa misma imagen con al techo, podemos dejar visibles las antiguas vigas de madera que darán un aspecto atractivoa la casa. Si nuestra casa consta de más de una planta, el rediseñar la escalera nos permitirá tener una mayor tranquilidad por la seguridad que aportan los nuevos materiales, pero no debemos olvidar conservar la esencia del entorno, por lo que optaremos por madera natural reciclada, piedra o baldosas de barro.
También recomendamos reutilizar las puertas y ventanas (algunas casas disponen de puertas y ventanas de madera o forja realizadas a mano, lisas o con adornos, que vale la pena conservar), queal pulirlas, barnizarlas y lacarlas nos darán un aspecto nuevo, pero manteniendo una sensación de antigüedad. Uno de los mayores inconvenientes de las casas antiguas era la estrechez de las ventanas y la escasa luz de las estancias, por lo que recomendamos agrandar las ventanas para facilitar la entrada de la luz natural y ampliar las vistas, así como crear aberturas acristaladas en los muros para dar una mayor sensación de amplitud y luminosidad. No obstante, hay que tener en cuenta que, en la mayoría de los casos, en este tipo de construcciones, las aberturas eran pequeñas por pura necesidad funcional. Es decir, en climas extremos cuanto más pequeña es la abertura, mejores condiciones climáticas se obtendrán en el interior.
Contraventanas de colores, persianas alicantinas o cortinas de esparto nos ayudaran a mantener una mayor sensación de frescor durante el día. Y no debemos olvidarnos de la iluminación artificial, puesto que uno de los aspectos importantes de la decoración recae sobre el tipo de lámparas que usemos (desobremesa, de pared, de pie, apliques, etc.), que nos permitirán conseguir ambientes cálidos y acogedores. Si disponemos de techos de doble altura, podríamos optar por alguna lámpara grande de estilo candelabro, si queremos condicionar un estilo extremadamente rústico o medieval.
También podemos unir estancias abriendo vanos rematados con vigas de madera para darles un aspecto más rustico, lo que nos permitirá ganar espacio y facilitar la circulación de la luz. Para las puertas interiores de comunicación con el salón, también podemos usar estructuras de hierro y cristal, que darán una mayor sensación de amplitud a la estancia. Y en toda casa rural, no puede faltar el hogar o la chimenea en el salón, tanto en su aspecto decorativo como funcional. Actualmente, podemos encontrar multitud de chimeneas modernas que encajaran totalmente con la decoración rural. Desde luego, una de las sensaciones más agradables del invierno, será sentarnos ó tumbarnos junto a la chimenea, tapados por una manta suave de franela. Para una mayor calidez en el salón, además de las mantas en el sofá, podemos incluir cojines y alfombras.
Quizás, el mayor problema se nos presenta con el suelo de la casa. Habitualmente, el suelo es uno de los aspectos más deteriorados de una vivienda (baldosas rotas, falta de color, etc.). Además, debemos tener en cuenta que las tendencias han variado hacia elementos con una mayor resistencia y fabricados con otro tipo de materiales. Aquí se nos plantean dos opciones, arreglar las zonas más estropeadas o cambiar todo el suelo de la casa. Si nos decidimos por cambiar todo el suelo, podemos optar por un suelo cerámico con baldosas de barro cocido o terracota. También podemos decidirnos por instalar suelos de madera. Si optamos por arreglar algunas partes, si disponemos de un suelo con baldosas hidráulicas, podemos introducirlo en un suelo de barro o cemento pulido (microcemento) para combinar diferentes colores y dibujos.
Otro de los problemas que podemos abordar al acondicionar una casa rural es la cocina y los baños, puesto que algunas casas no disponían de una cocina como lo que entendemos ahora por este concepto (en algunas casas antiguas cocinaban en una chimenea con lo que daban en llamar ”fuego a tierra”) y en otras casas, el baño se encontraba fuera de la casa y era lo que comúnmente se conocía como “letrina o retrete” (solo para hacer las necesidades fisiológicas), puesto que para bañarse se usaban barreños que ponían en las habitaciones cuando era necesario. Así que podemos encontrarnos con casas que dispongan de cocina y baño, pero muy anticuados o las que ni siquiera tengan contemplado estos espacios. Si nuestra casa se encuentra entre las primeras, podemos refórmalos para hacerlos más funcionales y cómodos combinando detalles modernos (grifos y sanitarios) con otros elementos decorativos antiguos que le den un aire más rustico (muebles, lámparas, etc.). Si esta entre las segundas, en el momento de la reforma inicial habremos tenido que seleccionar el lugar para ubicar estas zonas y después, al igual que en el ejemplo anterior, le daremos con las instalaciones y los complementos el aspecto que queremos conseguir.
Para la cocina, una opción que se está utilizando mucho actualmente es construir los armarios de obra con encimera de mármol en tonos marrones y ponerles puertas de madera natural o pintadas, lo que nos permitirá variar el color de la decoración cada vez que nos cansemos, simplemente cambiando las puertas de los armarios. Si el espacio lo permite, añade una gran mesa de madera con sillas confortables. Para aportar un estilo más campestre a la cocina podemos decorar las paredes con utensilios tradicionales comocacerolas de acero, sartenes de hierro, etc. y en los estantes, cucharas y recipientes de madera.
Para los baños, recomendamos el microcemento para paredes y suelos, optando por platos de ducha de pizarra; aunque hay quien sueña con una bañera isla de hierro fundido (a las que luego aplicaban una capa de cerámica esmaltada) que recuerde las que se usaban a primeros del siglo XX y que podríamos instalar junto con una alfombra de estampados geométricos que diera un aire más elegante y atrevido al baño. Si queremos acercarnos al nuevo estilo rustico, podemos complementar los baños con accesorios de madera envejecida.
Los dormitorios deben saber transmitirnos una sensación de relajación. Por ello, utilizaremos principalmente suelos y muebles de maderas nobles como la madera y usaremos ropa de cama, cojines y alfombras en tejidos naturales y con colores cálidos. Usaremos unailuminación tenue, basada principalmente en pequeñas lámparas para las mesitas de noche, aunque también podemos poner una lampara de techo, preferiblemente de madera o hierro. Y si queremos darle un toque clásico a la vez que practico a nuestro dormitorio, un dosel o mosquitera, sería un elemento a considerar. Un efecto sorprendente en el dormitorio principal seria revestir toda la pared central donde estará el cabezal de la cama con madera, lo que creará una sensación de cabaña rustica.
La decoración de una casa rural.
Y llegamos al aspecto de la decoración, donde si queremos mantener el encanto del estilo rustico, sería conveniente reutilizar mobiliario antiguo (sillas, mesas, cómodas, alacenas, camas, armarios, aparadores, arcones, etc.) elaborado en madera o de hierro, por lo que restaurar muebles antiguos, si te gusta el trabajo manual, puede ser un gran ahorro y dará un toque personal a la casa. Aprovechando el grosor de las paredes podemos incluir armarios empotrados o librerías a medida, siempre que existan huecos, porque de lo contrario, se entiende que es un muro grueso estructural y no conviene tocarlo. También es interesante sustituir algunos tapizados en butacas y sofás con fundas de algodón, lana o lino, tanto en estilo liso como en estampados rayados o florales, que también, se pueden usar en cortinas. Los colores predominantes en las casas rurales son las propias del entorno, los tonos tierra, los naranjas, los amarillos, los verdes y los azules. Otra opción recomendable son los complementos en fibras naturales (mimbre, esparto, teca, ratán) donde alfombras, cestas, sillas y butacas, darán un aire muy rural a las estancias. Para las paredes, podemos usar cuadros de paisajes, bodegones, escenas campestres y platos decorativos. Podemos complementar la decoración del salón, la entrada y los pasillos con jarrones de piedra o barro con plantas de interior, así como poner sobre estanterías o mesas auxiliares candelabros y velas.
Y por supuesto, en una casa rural no podíamos olvidarnos del espacio exterior. Dependiendo del espacio del que dispongamos, podemos distribuirlo en distintas zonas. Sin duda, la clave principal seria disponer de un hermoso jardín que recorrer por un camino de piedra o cantos rodados, que disponga de una fuente decorativa o una alberca, que nos lleve hasta la zona para la barbacoa, donde hayamos creado un porche con un comedor o un salón exterior al que añadirle un banco y una mesa de obracon cómodos sillones y llamativos complementos (cojines, velas, jarrones), desde donde podemos ver nuestra piscina instalada junto con una zona de césped para podernos tumbar al sol después de un baño relajante, etc.. En resumen, disfrutar de las opciones que nos ofrece el aire libre, convirtiendo el exterior en un complemento más de la casa para facilitarnos el poder descansar y relajarnos.
Aunque en este articulo hemos querido mantenernos en un estilo rustico tradicional, hoy día, muchas casas rurales y, especialmente si las decora un interiorista, se están realizando en el estilo Rustic-glam, es decir, el rústico de la estructura se mantiene junto a algunos elementos decorativos (detalles puntuales) y se aplica todo tipo de tecnología para hacer de la vivienda un espacio confortable adaptado a las necesidades que hoy día se precisan, como por ejemplo, una chimenea de diseño y más eficiente. Especialmente, en el caso de cocinas y baños, se diseñan con todo tipo de comodidades y diseños modernos. Esa mezcla ecléctica es la que le conferirá personalidad a la vivienda restaurada.