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El aumento de la demanda, el encarecimiento del gas y la subida del precio de las emisiones de CO2 son los principales motivos que explican por qué sube el precio de la luz, tanto en nuestros domicilios particulares, comunidades de vecinos y en nuestras empresas.

Pero, tenemos varias alternativas que nos pueden ayudar a rebajar nuestro coste mensual. En este artículo os explicamos cuáles son las principales al alcance de todos, y que podemos realizar con un poquito de conciencia:

  • Aislar la vivienda con mejores ventanas y puertas.
  • Reemplazar las bombillas por iluminación led.
  • Desenchufar aparatos cuando estos no se usen o no sean imprescindibles para nuestro día a día.
  • Tomar duchas breves porque en la mayoría de los casos tenemos un termo de luz.
  • Apagar las luces cuando no sean necesarias.
  • Bajar la temperatura del calentador, tenemos que intentar optimizar la temperatura de nuestro calentador a la época del año en la que estemos.

Por otro lado, tenemos varias alternativas sobre cómo ahorrar energía en nuestros domicilios, comunidades de vecinos o nuestras propias empresas.

¿Cómo funciona el autoconsumo eléctrico a partir de energía solar?

En un lenguaje de calle: es el mismo concepto que si tienes una estufa de leña en tu casa, que genera calor para calentar la casa.

Y, por último, puedes acogerte a la compensación simplificada para que te indemnicen los excedentes que viertas a la red, al final de mes.

En este caso, hay mucha controversia aun, no podemos dar unas cifras exactas de compensaciones ni de ahorro con un sistema de autoconsumo, todo dependerá del tipo de vivienda, así como de su demanda eléctrica.

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Tipos de autoconsumo fotovoltaico.

Tenemos varios tipos de autoconsumos según nuestras necesidades:

  • Sistemas que no están conectados a la red eléctrica (se denomina autoconsumo aislado), que necesitan del uso de baterías y que, al no tener el respaldo de la red eléctrica, en caso de fallo de las baterías, no tendríamos energía eléctrica.

  • Sistemas que si están conectados a la red (se denomina autoconsumo conectado a la red), en cuyo caso la vivienda (autoconsumo residencial) o empresa (autoconsumo fotovoltaico industrial), tendrá dos fuentes de suministro eléctrico: los paneles solares por un lado (propiedad de la vivienda o empresa), y la red eléctrica de compañía por otro.

  • Sistemas que están conectados a la red, pero pueden funcionar también como aisladas (se denominan sistemas de autoconsumo conmutados con la red), y disponen de un conmutador que, en caso de caerse la red eléctrica, se pone a funcionar como una instalación solar aislada con baterías.

En futuros artículos os enseñaremos otras opciones más asequibles para nuestras viviendas o negocios.